Mi yo verdadero

No me preguntes de donde vengo.
Preocúpate mejor a dónde voy.
No quieras complicarme la existencia
con esas frases mediocres y sin razón,

Ya deja de apuñalarme con voz herida.
Aparta de ti esa ira que te socava la razón.
Deja ese puerilismo
que te aparta de tu verdadero yo

Es que no te basta todo lo que soy?
Ponle un cerrojo a esas dudas
que buscan enraizarse de tu corazón.
Ventila pronto tu alma, saca de ti esa putrefacción.

Abre bien tu mente. No hay engaños en mí.
Yo soy la que siempre fui. Yo soy la que soy
Una mujer de verde llanura. De este jardín
La más preciada y perfumada flor.

Esa, que sabe emplear bien la expresión.
La cual nadie con sus infames palabras amedrento
Empuñada en mis manos va la verdad.
Mi identidad es una y propia, no la que el infame te sembró,

A cara limpia y sin engaño, vaticino ante vos,
Más no conozco otra arma que mi correcta razón.
Soy genuina, no soy un cuento de hadas
ni producto de una mente que contra vos fabulo.

Ven, deja ya las reyertas, las treguas no las cree yo.
Es que aun no ves que mi lema es la paz y de corazón.
No indagues en mi vida, no hay nada que ocultar.
Soy la que dije ser aunque eso te pese a vos.

Ni buena, ni mala; “justa” esa realidad soy.
Esa que no va averiguando vidas, ni de piel su color
Soy aquella que no lastima.
Esa que perdona a quien con sus palabras injurio.

Este es ¡MI YO VERDADERO!.
No te metas conmigo; no me meto con vos.